Destacados

Ernesto

El doce de abril fue el día en el que Ernesto se enfadó porque aún no era su cumpleaños. Bueno, realmente eso venía pasando casi todos los días desde febrero. El doce de abril, Margarita, la hermana mayor de Ernesto, fue al parque con una de las perneras de sus pantalones subida hasta la rodilla. También se arremangó la camiseta, pero solo de un lado. Cuando la gente le preguntaba que por qué iba vestida así, ella les decía que era para que la gente se acordara de que… «hay muchas personas que tienen las extremidades diferentes, y no pasa nada». El doce de abril, después de que Ernesto se enfadara, Margarita le preguntó que cuántos años iba a cumplir en mayo (pensar en eso siempre tranquilizaba a Ernesto, le hacía sentir bien). Ernesto sacó cuatro dedos de su mano derecha. Los dos se rieron y empezaron a jugar a los superhéroes. A Ernesto le tocaba elegir primero, así que se quedó con Spiderman, el hombre araña. Es su favorito.

El doce de abril se celebra el Día de las Personas con Extremidades Diferentes, con la campaña de visibilización: «Mangas Disparejas»

El doce de abril, Ernesto estrenaba «manita». Una prótesis para su brazo izquierdo que Manolo, el ortopeda, había hecho a medida. Esta nueva «manita» era especial. Manolo la había decorado como si fuera el traje de Spiderman. Ernesto se la colocó en su brazo. Al encajarla, salió el aire de su interior y sonó como un «peo». Ernesto y Margarita se volvieron a reir. Eso era señal de que la prótesis estaba bien colocada… ¡a correr! El doce de abril, y el trece y el catorce… y todos los días… los niños y niñas con extremidades diferentes, con prótesis o sin ellas… juegan, ríen y afrontan sus retos de cada día de forma similar a la que lo hacen el resto de personas.