El primer día que los vi caía un chaparrón de los gordos.
«¡Vaya tormenta!» -había exclamado mamá.
Y cuando hay tormenta no se puede ir a jugar al parque, así que no tuve otro remedio que quedarme encerrado en casa.
Truenos, relámpagos y mucha lluvia. ¡Llueve a cántaros! y entre las sombras, desde su ventana, nuestro pequeño protagonista observa unas extrañas figuras. ¡Son monstruos!
A veces el aburrimiento despierta la imaginación y la creatividad, las cosas dejan de ser lo que parecen y una tarde que parecía de lo más aburrida puede convertirse ¡en una aventura espectacular!
Con esta «tormentosa» ilustración comienza Los monstruos de la lluvia, el nuevo libro ilustrado de Raquel Gu peques de la casa. Una historia sorprendente para leer en familia, especialmente, si llueve mucho.