¿Sabías que existe una familia de animales acuáticos con características de «sirenas»? Son los sirenios y les dieron su nombre en la antigüedad porque supuestamente se parecen a las sirenas cuando están amamantando a las crías. Son mamíferos placentarios que se alimentan de plantas, y aunque tienen cierto parecido con morsas y focas, la verdad es que están emparentados con los elefantes, ya que ambos comparten antepasados anfibios.
Los sirenios son popularmente conocidos como «vacas marinas» debido a que solo se alimentan de plantas
El dugongo es el más pequeño de la familia de los sirenios. Tiene una cola bífida y los ejemplares adultos pesan unos 200 kilos. Suele pastar por las noches y se alimenta exclusivamente de algas. Como sus parientes cercanos, los manatíes, a los dugongos les gusta nadar en aguas templadas, pero al contrario que estos prefieren el agua salada al agua dulce. Al dugongo lo podemos encontrar en zonas costeras cálidas desde África Oriental hasta Australia, entre ellas las del Mar Rojo, el Océano Índico y el Pacífico.
La vaca marina de Steller, también pertenece a la misma especie de los dugóngidos, medía ocho metros de longitud y se extinguió hace 250 años
Los dugongos son animales pacíficos y nadan cerca del ser humano sin miedo. Actualmente son una especie en peligro de extinción porque muchas de las praderas marinas donde viven se encuentran esquilmadas o contaminadas, por lo que cada vez les cuesta más encontrar alimento. En los últimos años, el número de ejemplares de dugongo se ha reducido drásticamente convirtiéndose en una especie muy vulnerable, por lo que en muchos países como Filipinas, Japón o Tailandia están regenerando su hábitat costero estableciendo zonas prohibidas para la pesca y el tránsito de barcos.