Aparecen a montones en todas las películas, cómics, novelas y series televisivas de la saga, pero ¿sabrías decir a qué se dedican? Cada droide de Star Wars pertenece a una gran clase: los astromecánicos, los de combate, los de protocolo… Estos son algunos de los tipos de robots que podían verse hace mucho tiempo en aquella galaxia muy, muy lejana.
Droides colicoides
Los colicoides son una raza de seres con forma de insecto originarios del planeta Colla IV. Igual que los humanos fabrican sus droides con aspecto de persona, los suyos tienen formas que recuerdan a las de los insectos. Los droides fabricados por los colicoides son casi siempre robots de batalla y son muy eficaces contra los jedi. Algunos de los modelos colicoides más famosos son los Droidekas (también llamados droides destructores) o los droides de sabotaje Pistoeka (también llamados droides zumbadores).
Droides astromecánicos
Los droides astromecánicos, también llamados astrodroides, sirven como robots multifunción en las naves espaciales. Son compactos, resistentes y están equipados con un sinfín de herramientas. Además, pueden acoplarse a las propias naves y ejercer como su copiloto. Aunque todos los miembros de esta extensa familia de robots solo hablan la lengua binaria (un idioma de ruidos y pitidos propio de droides) algunos de ellos, como R2-D2 o C1-10P (más conocido como Chopper), figuran entre los droides más famosos y queridos de Star Wars.
Cíborgs
Los cíborgs son organismos que tienen una parte biológica y una parte robótica. Aunque muchos personajes de Star Wars pueden considerarse cíborgs (hasta el mismísimo Darth Vader), lo cierto es que en algunos de ellos acabó predominando la parte droide. Lobot, por ejemplo, tenía aspecto de persona, pero había perdido su identidad humana y su mente era puramente robótica. Y el general Grievous conservaba los ojos, el cerebro y algunos órganos más, pero el resto de su cuerpo era robótico.
Droides de protocolo
Los droides de protocolo tienen aspecto humanoide y miden cerca de 1,7 metros de altura. Son droides que asisten a las especies inteligentes de la galaxia en tareas relacionadas con la comunicación. Algunos de ellos, como C-3PO, son capaces de traducir más de seis millones de idiomas, tanto biológicos como droides. Entre los modelos más populares estaban los 3PO y los droides de inventario RA-7, conocidos informalmente como «droides de la Estrella de la Muerte» porque abundaban mucho en ella.
Droides alterados
Como ocurre con cualquier máquina, también los droides pueden modificarse con nuevas piezas y recambios. L3-37 era un droide piloto cuyo cuerpo incorporaba piezas de otras clases de robots. Fue ella misma quien se dedicó a hacer todas esas modificaciones en su propio cuerpo hasta transformarse en un droide humanoide. El imponente K2-SO, por su parte, era un droide modelo KX (una serie dedicada a tareas de seguridad) que fue reprogramado para servir a la Alianza Rebelde y traicionar al Imperio Galáctico.
Droides de combate
Los droides de combate B1 y B2, fabricados en Geonosis, son los modelos que nutrían las filas del ejército separatista durante las Guerras Clon. Aunque no son droides muy hábiles, lo cierto es que forman legiones muy numerosas y eso hace que sea muy difícil vencerlos en un choque frontal. A diferencia de la mayoría de droides de Star Wars, ni los modelos B1 estándar ni los superdroides de combate B2 pueden tomar decisiones complejas por sí mismos; necesitan que un droide táctico o un ser biológico los comande.
Droides esféricos
Aunque hay otros droides esféricos, los más famosos son los de la serie BB, un tipo de robot astromecánico más compacto y veloz que los modelos R2. Los BB son máquinas todoterreno capaces de moverse con rapidez y de recorrer grandes distancias. Estos droides pueden acoplarse a los cazas y a otras naves más pequeñas para ejercer como copiloto. El droide BB-8 es uno de los más conocidos de esta familia en la que también se incluye a BB-E9, un pequeño robot esférico de color negro que servía en las filas de la Primera Orden.