FRANCES HODGSON BURNETT · REINO UNIDO 1911
Solo hace falta que alguien te prohiba entrar en un sitio para que las ganas de colarse se multipliquen. Que se lo digan a Mary Lennox, una niña de diez años que no puede contenerse cuando descubre todas las habitaciones misteriosas que hay en Misselthwaite Manor, una enorme finca inglesa donde se traslada a vivir tras la muerte de sus padres en la India. La curiosidad podrá con ella y, detrás de puertas y cortinas, descubrirá estancias oscuras repletas de cuadros con personajes antiguos…. ¡Y alguna sorpresa más!
Durante casi cien años, la India estuvo bajo el control de la Corona Británica hasta que el movimiento apoyado por Mahatma Gandhi logró la independencia en 1947
Junto a Martha, Colin, Dickon y Ben, Mary rescatará del olvido un jardín secreto que ha permanecido cerrado durante años. Narcisos, lirios y rosales conviven en un oasis verde asilvestrado donde las plantas se entrelazan con las ramas de los árboles. A lo largo de la historia y en cada cultura de forma particular, los jardines han sido lugares en los que perderse y vivir grandes aventuras. Como los reyes de Francia, que hicieron construir jardines perfectamente simétricos en el Palacio de Versalles, o los cerezos en flor que tiñen de blanco los parques de Japón. Incluso en la fantasía de El Jardín de las Delicias, el cuadro alegórico de El Bosco.
Una alegoría es un relato o imagen que representa otra cosa diferente. En su cuadro, El Bosco dibuja un jardín que simboliza el paraíso, la vida terrenal y el infierno
La historia de Mary es la historia de una niña que consigue ser feliz a pesar de perderlo todo. Desde su publicación hace ya un siglo, El jardín secreto se ha convertido en un clásico que sigue presente en bibliotecas y librerías de todo el mundo. En uno de los parques más emblemáticos y conocidos, el Central Park de Nueva York, existe un monumento dedicado a Mary y Dickon. ¿Dónde podría estar mejor que en un jardín, aunque no sea secreto?