A menudo, los humanos nos describimos a nosotros mismos como seres evolucionados: compartimos un lenguaje; tenemos capacidad de reflexión, lo cual nos permite valorar y analizar distintos enfoques; y tenemos cultura, que es el cúmulo de conocimientos que se transmite de generación en generación. Por ejemplo, la sociedad europea desciende, culturalmente, de las culturas griegas y romanas, que pensaron, analizaron y descubrieron montones de cosas.
Una de aquellas cosas que pensaron, analizaron y descubrieron los antiguos griegos fue que la Tierra era esférica
Recientemente, una científica llamada Asheley R. Landrum ha descubierto que más gente de la esperada cree que el planeta Tierra es plano, en lugar de esférico. Muchos de ellos, según muestra su estudio, lo creen porque hay vídeos en Youtube que así lo defienden.
Durante mucho tiempo los griegos se imaginaron la tierra como un lugar plano muy grande, rodeado por un río que ellos llamaban Oceano. De hecho, no se atrevían a navegar muy lejos de la costa, porque creían que, en aquel lugar, justo en el límite de la Tierra, habitaban los peores monstruos marinos. Pero algunos de los griegos más inteligentes teorizaron que la Tierra era esférica.
Antiguos filósofos griegos, como Pitágoras o Eratóstenes, defendieron que la tierra era esférica e incluso calcularon su diámetro
El primero de ellos fue Pitágoras, que creyó que la tierra era esférica porque creía que era la forma geométrica más perfecta. Pero Eratóstenes, que vivió alrededor del 250 aC, ahondó en la idea de que era esférica. De hecho, calculó el diámetro de la Tierra: para ello, midió la sombra que, en el mismo día y a la misma hora, proyectaba un palo clavado en el suelo en dos ciudades diferentes: Asuán y Alejandría, que están separadas unos 800 km. A partir de esa medida, usó las matemáticas para calcular el diámetro de la Tierra con muy poco error.
La tradición cultural y el querer demostrar hipótesis establecidas previamente es lo que ha hecho avanzar a la sociedad
En 1519, siguiendo esa tradición cultural Fernando de Magallanes zarpó desde Sevilla hacia el oeste y hacía ahí navegó. En 1522 esta expedición llegó, nuevamente, a Sevilla: evidenciaron que la que la Tierra era esférica, puesto que navegaron, por primera vez, siempre con el mismo rumbo para llegar al mismo sitio. Muchas otras evidencias siguieron a esta primera proeza. Pero los primeros en creerlo, como siempre, fueron los griegos.