Ordenadores, videoconsolas, tabletas, smartphones… Cada vez hay más dispositivos digitales en nuestra vida. Los utilizamos para comunicarnos, para aprender y, por supuesto, ¡para divertirnos! Nunca había sido tan fácil jugar a videojuegos: se pueden descargar desde la tienda de aplicaciones del móvil, en páginas web o plataformas de gamers.
Pero no todas las descargas son lo que parecen, sobre todo las gratuitas. La mayoría de aplicaciones incluyen publicidad que no siempre es apta para todos los usuarios. Algunos videojuegos permiten a los jugadores conectarse desde el perfil de sus redes sociales y no garantizan la seguridad de sus contraseñas.
Toma nota de estos consejos para proteger tus dispositivos y tu identidad en internet.
- Descarga o compra juegos desde las plataformas oficiales. Muchas páginas que ofrecen trucos o guías de juegos pueden esconder virus informáticos o enlaces peligrosos.
- Puede que sea el videojuego de moda, pero tal vez no es el más adecuado para ti… no te preocupes, ¡hay un montón de juegos entre los que elegir aptos para tu edad!
- A la hora de poner contraseñas, utiliza claves diferentes para los distintos juegos online en los que te hayas registrado. Así, si hackean una cuenta, no afectará a todas las demás
- Mantén las actualizaciones de seguridad al día: será más difícil que un malware afecte a tus dispositivos si el antivirus está actualizado
- Evita conectarte desde tu perfil en redes sociales. Vincular tu perfil de jugador con las redes sociales es peligroso y puede perjudicar tu privacidad: otros jugadores pueden acceder a tus redes y ver tus fotos, tus contactos…
- Los videojuegos son geniales para divertirse un rato. Pero si juegas con otros usuarios en línea, recuerda que no todo el mundo es quien dice ser en la red… cuidado con el chat y los fotos.
- Instala navegadores y buscadores seguros que impidan la entrada de publicidad invasiva y el acceso a contenidos inapropiados.