RAYUELA
Para los adultos a los que les gusta leer, Rayuela siempre será un libro que puede leerse de principio a fin, o intercalando los capítulos siguiendo un orden que el autor nos ofrece. La numeración de cada parte tiene un doble sentido, de modo que dentro del mismo libro hay dos escondidos. Pero la rayuela también es un juego.
Se cree que el juego está basado en el libro de La divina comedia, de Dante Alighieri. El personaje debe superar una serie de obstáculos sin dudar, avanzando a pesar de las dificultades, como en las casillas de la rayuela. Cada número representa uno de los nueve mundos que debe atravesar para llegar de la tierra al cielo, pasando por el purgatorio… y siempre acompañado de la piedra, que sería su alma.
Pero eso es para los lectores. Para los niños que aún no pueden leer libros de mayores (aunque eso se lo inventan para provocar a los más pequeños), la rayuela es un juego magnífico cuando solo dispones de un pedazo de tierra (o cualquier superficie, pero necesitarás una tiza), una piedra, una suela del zapato para gastar dibujando el circuito en el suelo y una gran dosis de aburrimiento. Del uno al nueve, el jugador deberá ir lanzando su piedra (o cualquier otro objeto de una medida similar) y atravesar todos los estadios a la pata coja, sin salirse de los cuadrados, recogiendo la piedra al volver y sin pisar las líneas. Si estás aburrido pero no tienes equilibrio, mejor que no te atrevas con el purgatorio.